La cándida, dulce y esclavizada Eréndira venderá una y otra vez su cuerpo milagrosamente virginal para pagar la deuda que su desalmada abuela le reclama. Sin embargo, después de terrible promiscuidad, pasado el tiempo, llegará el salvador de la niña: Ulises, quien con varias cuchilladas mal dirigidas ha de hacer fluir sangre verde y pútrida de la antigua prostituta. Y así la cándida Eréndira podrá huir a través de la playa con el chaleco de oro en su poder.
El mundo de fuegos de artificio de Gabriel Garcia Márquez desarrollado en sus obras como El Coronel no tiene quien le escriba o Cien años de soledad, vuelve en estos siete cuentos para desplegarse colorido y fantasía. Por detrás del arco iris tropical de las descripciones, flota una mirada de comprensiva ironía, acompañada de una sonrisa melancólica. No obstante, ninguna de las dos perdona la alienación absurda de la sociedad actual.